XLIV- NARRATIVA DEL ODIO
Jugaron, como juegan las almas
que aún no han odiado.
Hablaron, como hablan las palabras
que ni tienen miedos ni tienen reparos.
Se hicieron amigos,
con la amistad de las tierras
que juntos labraron.
Y luego el tiempo pasó…
y la vida fue luego… y luego sucedió…
Luego…
Luego les ordenaron odiarse
y lo hicieron.
Dejaron de hablarse,
se hicieron enemigos,
colmaron eras de sangre y delirios
y en el frente, se mataron.
Pero antes de morir, uno junto al otro,
donde no mueren gobernantes sino soldados,
sus ojos se dieron la mano,
y fue entonces, en esa mirada terminal,
cuando reconocieron de nuevo,
al amigo de antaño.